En articulación con Policía de Infancia y Adolescencia, Equipo Móvil de Protección Integral (EMPI) del ICBF, Migración Colombia, Secretaría de Gobierno-Inspecciones y Comisarías, un equipo psicosocial y pedagógico de la Secretaría de Gestión Social, establecen la ruta que los llevará a desplazarse en distintos horarios, por las calles, semáforos, centros comerciales, esquinas, y comercio de la ciudad donde se evidencia la presencia de niños y adolescentes que se encuentran en condición de trabajo infantil o mendicidad.
"Durante la pandemia hemos continuado con los operativos, lo que queremos decir al padre de familia, es que los niños no tienen por qué estar exponiéndolos en las esquinas. Traerlos a pedir en las calles no es la solución al problema, al contrario, esto va a hacer que estos niños estén en la mendicidad, no logren estudiar y siempre se agrave la situación al interior de las familias", expresó el secretario distrital de Gestión Social, Santiago Vásquez.
El trabajo infantil puede entenderse como toda actividad, remunerada o no, realizada por menores de 18 años de edad, que les resulten peligrosas por su naturaleza o condición. El trabajo infantil impide el desarrollo escolar de los niños y adolescentes e implica un daño para su salud, al tratarse de actividades que los ponen en peligro de sufrir daños físicos, morales y psicológicos.
Por medio de las búsquedas activas se logran detectar estos casos de trabajo infantil, alta permanencia en calle, situación de vida en calle o mendicidad. Se realizan las verificaciones de los niños y adolescentes focalizados y la autoridad competente les dicta o no medida de protección, según sea el caso.
Una de estas medidas es la remisión de casos al proyecto de Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil y sus peores formas, en el que el niño o adolescente inicia en el Internado Monseñor Víctor Tamayo un proceso de atención psicosocial, aplicando intervenciones individuales y grupales de manera permanente por parte de un equipo interdisciplinario, conformado por psicólogos, trabajadores sociales y nutricionistas.
Adicional a esto, tienen un acompañamiento pedagógico, deportivo, cultural y de vida saludable, se le garantiza el acceso a la alimentación, por medio de un plan nutricional, adaptado a los requerimientos de cada uno de ellos, que consta de refrigerio y almuerzo, con el fin de que los niños y adolescentes salgan progresivamente de esa situación y puedan desarrollar un modelo integral de proyecto de vida de manera individual, familiar y social.
Esta población convive con su grupo familiar, de manera que el trabajo con sus familias es constante y se realizan distintas actividades como escuela de padres, cursos de formación y emprendimiento, entre otros, que logran fortalecerlos y convertirlos en los primeros garantes de los derechos de los sus hijos.
Es prioridad para el proyecto la gestión para el restablecimiento de los derechos de esta población, por lo que, por medio de las diferentes entidades y secretarías se les gestiona:
Cupos escolares.
Vinculación al sistema de salud.
Brigadas de salud.
Trámites de expedición de documento de identidad.
Convenio con corporaciones para cursos técnicos.
Actividades lúdico-recreativas.
Actividades pedagógicas y de inclusión social.
Actividades de participación ciudadana.
A la fecha, el proyecto en articulación con las diferentes entidades ha realizado un total de 99 búsquedas activas logrando sensibilizar a 801 niños en condición de trabajo infantil en sectores como la calle 72, norte de la ciudad, Circunvalar, Metrocentro y Centro de la ciudad.
“Esto es algo que venimos haciendo hace varios años y aún en plena pandemia no hemos parado. Lo más importante para nosotros es el restablecimiento de todos sus derechos, y mirar cómo desde el proyecto podemos ayudar no solo al niño sino también a su núcleo familiar, porque creemos fielmente que es una problemática que viene del hogar. También nos hemos articulado con Secretaría de Desarrollo Económico y muchas madres de los niños beneficiarios están siendo capacitadas en estos momentos con cursos de emprendimiento con oportunidades de empleabilidad”, expresó la líder del proyecto, Leila Yidios.
Trabajando por los Niños del Semáforo
El trabajo infantil es una realidad que afecta notablemente el bienestar de niños y adolescentes. En medio de la pandemia se incrementó la alta permanencia de estos en condición de trabajo infantil en las calles, lo que motivó a la primera dama, Silvana Puello; al secretario de Gestión Social, Santiago Vásquez; a la líder del proyecto de Prevención y Erradicación del trabajo infantil, Leila Yidios, y a la Fundación Finsocial a poner en marcha ‘Trabajando por los niños del Semáforo’, una estrategia de ciudad que busca minimizar los índices de trabajo infantil, sensibilizando al ciudadano a no entregar alimentos o dinero a niños o a adultos con niños que se encuentren en las calles.
El lanzamiento de esta campaña se realizó el 11 de noviembre del 2020 en los diferentes semáforos en donde se ha identificado mayor afluencia de niños y adolescentes practicando el trabajo infantil. El lanzamiento contó con diferentes actores en los semáforos, pasacalles, caballetes con fotografías de niños y adolescentes sufriendo esta problemática.
Adicionalmente, se contó con la distribución de códigos QR que dirigen al ciudadano a una página web en donde él mismo podrá donar dinero a la Fundación Finsocial en vez de entregarla al padre o madre que se encuentra en la calle exhibiendo al menor.
En esta misma página web, se podrán realizar denuncias cuando se encuentran personas con niños o adolescentes en las calles de la ciudad.
Durante la pandemia, la estrategia Trabajando por los Niños del Semáforo ha beneficiado a más de 50 familias a las que se le han entregado mercados, juguetes, ropa y cupos escolares.
La Secretaría de Gestión Social y la primera dama del Distrito hacen un llamado a la ciudadanía para denunciar en la línea de Whatsapp 321 6976686 los casos de trabajo infantil o mendicidad que vean en las calles.